Anteriormente cuando se tenía que enfriar la maquinaria de un automóvil se usaba agua para poder lógralo pero sus propiedades resultaban contraproducentes ya que pueden dañar las partes metálicas y a ciertas temperaturas cambia de estado es por eso que los líquidos refrigerantes salieron al mercado ayudando al motor a no sobrecalentarse sin afectar su integridad.
Sus características a grandes rasgos son baja temperatura de congelación, resistencia a temperaturas altas, bajo perfil de corrosión para no afectar el motor y propiedades liquidas que no generen espuma o sea mínima para que pueda circular de manera correcta.
Ahora si bien el refrigerante es adecuado existen situaciones en las que puede afectarse y es que se combine con el aceite del motor ¿Cómo llega a suceder? bueno, esto puede ser provocado por una avería en el intercambiador o quizá una ruptura en la culata, esta situación genera un líquido de color café espeso el cual hay que desechar.
El líquido resultante no beneficia al motor y no es del todo correcto arrojarlo en desagües ya que puede ocasionar daños en mares, ríos y suelos debido a la presencia de aceites, en Recsa Energy se aprovechan desechos como este por una parte con beneficios ambientales ya que se disminuye la cantidad de desechos en vertederos y beneficios industriales generando un combustible alterno que puede ser usado en fábricas.
Gestión integral de residuos peligrosos
